La música tradicional en Nerpio.
En 1975 había pocos televisores en Nerpio, en algún bar y en unas cuántas casas particulares en las que nos solíamos juntar los “crios” para ver alguna película o acontecimiento especial. A principios de 1.976 Nerpio salió en la tele en el programa Raices que unas semanas antes pasó por el pueblo para entrevistar y grabar a los Aguilanderos de Nerpio, lo recuerdo como un gran día, reunidos en la casa de algún vecino, pendiente del elevador por si “subía la Luz”, mirando emocionados la televisión. Como hemos cambiado, eso fue prácticamente ayer y ahora estamos saturados, “hiperconectados” con la información y las noticias bombardeándonos por todas partes y teniendo acceso a cualquier cosa desde el teléfono móvil. El pasado 24 de febrero tuvimos una pequeña charla sobre la música tradicional de Nerpio con motivo del Vigésimo sexto encuentro de cuadrillas, escogimos este vídeo completo como homenaje a los viejos animeros y por qué en el coloquio participaban tres de las personas que entrevistaban ese día. El fondo de la cuestión y donde yo quería llegar es a contrastar el pesimismo que reinaba en aquella época sobre la supervivencia de la música en Nerpio, casi todas las opiniones eran poco halagüeñas y seguramente era lo más real que en aquel momento se auguraba. Casi veinte años después de aquello Román Gómez inició su andadura con la Cuadrilla y comenzaron los Encuentros en Nerpio, después de más de cuarenta años de estas imágenes y de aquellos presagios poco prometedores todos conocemos la historia, lo que pasó después. Ahora mucha gente que visita Nerpio se sorprende de ver cómo en este pueblo casi todo el mundo toca, canta o baila. El reconocimiento este año de interés turístico regional a la fiesta de la música en Nerpio es un gran homenaje a todas las personas humildes y sencillas de la Sierra que trabajan por mantener y divulgar nuestra historia.
La música tradicional es la “transpiración" de los pueblos, el lamento que brama en lo mas profundo de su alma. En la memoria de estos campos de la sierra reposan adormecidas las composiciones de estas músicas, que son la sustancia ancestral del olvido, melodías que habitan en este lugar privilegiado por su historia y entorno. Son como el sonido dulce y monótono de la lluvia en las hojas de los nogales, la armonía del viento cantando entre los pinos o la sempiterna cantinela del agua corriendo en los arroyos. La música de Nerpio es un canto a la nobleza de sus gentes, una letanía mística de leyendas, cantadas con crudeza e ironía, de las que se desvela el duro, y a la vez alegre, trasiego de varias generaciones que habitaron estas tierras a lo largo del tiempo, es como un viaje a la rica sabiduría popular para aliviar las más banales frustraciones cotidianas. Unos sonidos cuya notación escrita esta en la memoria de los hombres y mujeres que poblaron y pueblan esta comarca de Taibilla. Unas sinfonías donde las partituras son tan anónimas, y a la vez tan cercanas, como las huellas pintadas que dejaron los hombres en las cuevas.
Los Aguilanderos son los villancicos de Nerpio. Coplas de navidad que interpretan las diferentes formaciones musicales que hay en este pueblo de la Sierra del Segura,. La música de la Pascua en Taibilla. Las letras de las coplas son tan sencillas y hermosas que nos recuerdan el sentimiento y esfuerzo continuo de los habitantes de esta tierra:
"Abre la puerta Maria, que te traigo el “aguilando”, una patata cocía, sopla que viene quemando"
.
Los Animeros o Aguilanderos, cuadrilleros románticos, juglares anónimos que relatan a través de sus canciones la vida en los pueblos y aldeas. Cuentan de todo en sus coplas, pueden ser humorísticas; " Y al subir al moralejo, si te pica un alacrán, se te ponen los "cojones", una miaja regular". Las hay, como no, de desengaños amorosos; "Como quieres que te quiera, si no te puedo querer, que me sigues engañando, desde la primera vez". Otras son locales y con sentimiento religioso como; " Nerpio no se llama Nerpio, que se llama la pureza, porque de patrona tiene, la Virgen de la Cabeza". Hay coplas con irónica sensibilidad erótica; "Debajo del delantal, tienes el infierno ardiendo, deja que meta la mano, aunque la saque corriendo ". Algunas con gran sentido filosófico y de predisposición hacia la fiesta, el cante y el baile; " Tengo que morir cantando, porque llorando nací, que las penas de este mundo, no son todas para mí". Hay tantas coplas como costumbres y siempre alguna adecuada para terminar; "Allá va la despedida, con un cesto de nueces, que te quiero regalar, como tu te lo mereces".
Pedro Serrano Gómez