jueves, 29 de febrero de 2024

Jesús Leal, el último Animero.


Jesus Leal Reyes, hijo de Gregorio y Lola y nieto del Tío Ramon "el abuelo" del que me contaba hace treinta años Ricardo Franquesa;
"Al Tío Ramón le apodaban "el abuelo", era el abuelo de Jesús, el que toca la pandereta ahora en los Animeros, mira tu si hace años ya, el "Tío Ramón el abuelo", tenia mucho talento pero sin explotar, tenia muy buen oído y mucha maña, con una navaja era capaz de hacer una guitarra".


Jesus Leal, nieto del "Tío Ramon el abuelo", es el último de los Animeros de Nerpio en "activo" al que todavía se puede ver en algún evento esporádico tocando la pandereta como refleja la artística imagen tomada por "Pepito no corras" (Como le llamaba mi Tío Angel Trajina hermano de Jesús) en el reciente encuentro de cuadrillas, una instantánea digna de Ramiro Retratista del Jinete Polaco, "capaz de mostrar el alma de las personas y de las cosas".
Jesus El Trajina es también el último de una estirpe familiar conocida por este apodo que los representa con contundencia por su manera de trabajar y su gran capacidad para afrontar desafíos laborales sin miedo a las dureza del terreno y las inclemencias climatológicas típicas de esta zona de la sierra.
Un linaje el de "Los Trajinas" compuesto por cinco hermanos del que ya solo queda Jesús, sus padres Gregorio y Lola vivieron muchos años "autoexiliados" en el "Cortijo Royo" después de la muerte de
Pedro Leal Reyes, el hermano más pequeño de "Los Trajinas", fallecido en un trágico accidente, en la segunda mitad del siglo pasado, que se produjo en la sierra de Nerpio cuando explotó la dinamita en unos trabajos que hacían los forestales en el monte, en aquel triste suceso murieron tres personas.
Una tragedia que está en la memoria colectiva de nuestro pueblo y que todos los que tenemos cierta edad hemos escuchado contar a nuestros mayores.
Jesús Leal es junto a Vítor Gómez los dos últimos Animeros del grupo de Nerpio; Vítor que cantaba con una voz portentosa como si salieran las penas del alma de su garganta "hayayay, hayayay morenita como te diviertes, hayayay, hayayay con los mozos que van a la fuente" y Jesús que saltaba haciendo cabriolas llevando la pandereta de los pies a la cabeza con ímpetu y trajín como si estuviera tocando la última copla de su vida, son los dos últimos representantes de una especie sin protección y en peligro de extinción.
Pedro Serrano Gómez
29/02/24